Creo fielmente que en nuestro trascurrir por esta vida nos encontramos a diario con un sinnúmero de personas con las cuales coincidimos de alguna u otra forma en una misma situación.
La pregunta nuevamente… ¿quiénes trascienden?
Haciendo un paneo general ahí están esas personas que son nuestra familia, están esas que se vuelven nuestros amigos, los amigos queridos y esos otros nuestros amores, aventuras, novios, amantes.
La siguiente pregunta… ¿qué hace la diferencia entre la acción de una mano, de un ser y la misma acción en la mano de otro ser? Dirán la mano…a ver si por lo menos explico la pregunta.
Hoy mi amiga, perteneciente al grupo de amigos queridos, a respuesta de esta pregunta me ha dicho: “todo depende de quién viene, no es lo mismo una pelota de basquet en las manos de un niño, que en las de un ladrón o en las manos de Michael Jordan”
El sujeto.-
Entonces, ese “quién”, usualmente alguien chévere, lindo, guapo, delicioso, rico (defínase a su gusto) no está en duda, las constantes se mantienen.
La acción.-
El “quién”… recapitulando… estos quienes suelen tener como constante un mismo accionar, podría cerrar mis ojos y sentir este accionar muy parecido, casi exacto en tal forma y acción entre todos los quienes, pero ¿qué carajos hace que al cerrar mis ojos e imaginarme determinada acción en manos de un “quien” (1) en particular, hace que mi cuerpo se eleve como una cometa, se estremezca como un pequeño ramito de hojas en una ventisca?, y ¿por qué carajos al cerrar mis ojos e imaginarme la misma determinada acción en manos de otro “quién” (2) hace que diga ¡no dios mío, qué horror¡?
¿Qué hace que sea media noche y yo escriba sobre mis reflexiones, mientras un “quién” (2) duerme y aquel otro “quién” (1) ya está en pie?
No me hablen de química, creo que básico se necesitan dos elementos para producir una acción, y sin embargo ya habiendo demasiada distancia con el otro elemento (1), este es capaz de producir explosivas reacciones. El otro (2) mal accionar del elemento para decirlo claramente, estando cerca, no está en capacidad de producir nada!
¿Y qué queda ahora, pensar en la pelota en manos de Michael Jordan?
¡Pero si el niño aquel (1) tiene gran destreza con la pelota!, debería estar en las ligas mayores.
¿Depende?... ¿de qué?
